Corto grabado en 2008 en el que mantengo las constantes de la mayoría de aquellas grabaciones: Sonido ambiente en ocasiones inaudible, falta de planificación y prisas, muchas prisas. Eso si, entre tanto error técnico, algún acierto hay, creo yo...Dura poco. Noorrr.
miércoles, 8 de febrero de 2012
jueves, 2 de febrero de 2012
¿Quién puede matar a un niño?: parte 2
Los chicos del maíz e influencias posteriores
En 1979, Stephen King publicó el cuento Los chicos del maíz, dentro de su estupenda antología El umbral de la noche. No sabemos con certeza si King llegó a ver la cinta de Chicho, pero los parecidos son evidentes, y la película que se estrenó en 1984 con el mismo título del cuento, dirigida por Fritz Kiersch, es una mala copia del film español. Los niños también masacran a los adultos de un pueblo aislado y se mueven en grupos armados con cuchillos y hoces, aunque aquí los motivos de su comportamiento sean la adoración a un Dios pagano y monstruoso. También tenemos a una pareja en apuros, niños jugando a matar e intentos de crear una atmósfera asfixiante, pero tras un inicio prometedor, el resultado es decepcionante, ingenuo y terriblemente comercial. Fue una de las producciones más taquilleras de aquel año, siendo la copia del modelo a su vez modelo de otras copias. Un año después de publicarse el cuento de King se estrenaron series-b como Cumpleaños sangriento (1981) de Ed Hunt, o Abrazo mortal (1981) de Max Kalmanowic, a las que siguieron otros títulos olvidables y numerosas secuelas de Los chicos del maíz.
En 1979, Stephen King publicó el cuento Los chicos del maíz, dentro de su estupenda antología El umbral de la noche. No sabemos con certeza si King llegó a ver la cinta de Chicho, pero los parecidos son evidentes, y la película que se estrenó en 1984 con el mismo título del cuento, dirigida por Fritz Kiersch, es una mala copia del film español. Los niños también masacran a los adultos de un pueblo aislado y se mueven en grupos armados con cuchillos y hoces, aunque aquí los motivos de su comportamiento sean la adoración a un Dios pagano y monstruoso. También tenemos a una pareja en apuros, niños jugando a matar e intentos de crear una atmósfera asfixiante, pero tras un inicio prometedor, el resultado es decepcionante, ingenuo y terriblemente comercial. Fue una de las producciones más taquilleras de aquel año, siendo la copia del modelo a su vez modelo de otras copias. Un año después de publicarse el cuento de King se estrenaron series-b como Cumpleaños sangriento (1981) de Ed Hunt, o Abrazo mortal (1981) de Max Kalmanowic, a las que siguieron otros títulos olvidables y numerosas secuelas de Los chicos del maíz.
Más recientemente, destacar la funcional pero efectiva Eden Lake (2008) de James Watkins o la interesante The Children (2008) de Tom Shankland, quizás la más cercana a los conceptos que el director español quiso plasmar treinta y dos años antes (En The children, los niños parecen poseídos por un virus desconocido que los vuelve violentos, pero a su vez parecen querer vengarse del trato de los adultos, y se coordinan como si tuvieran un solo pensamiento en la cabeza). En todas ellas se sigue más o menos el esquema introducido por Chicho en su película: Niños que se valen de su aparente inocencia para destruir al adulto, grupos coordinados de infantes homicidas, y adultos incapaces de hacerles frente.
Una reflexión final
En todo caso, ¿Quién puede matar a un niño? sigue siendo el más atrevido de todos estos filmes. Se podría decir que esta película es un cruce entre Los pájaros y El pueblo de los malditos, pero esa mezcla ha dado como resultado una película pionera dentro del género de terror. Es un subgénero de niños crueles y felices de serlo, aparentes crios inocentes que se mueven como un conjunto asesino e irracional, y donde la diversión se encuentra en la aniquilación del adulto.
Chicho ha declarado en más de una ocasión que no quiso hacer una película cargada de crítica social o un film de denuncia; sólo pretendía inquietar al público.
Vaya si lo consiguió.
En todo caso, ¿Quién puede matar a un niño? sigue siendo el más atrevido de todos estos filmes. Se podría decir que esta película es un cruce entre Los pájaros y El pueblo de los malditos, pero esa mezcla ha dado como resultado una película pionera dentro del género de terror. Es un subgénero de niños crueles y felices de serlo, aparentes crios inocentes que se mueven como un conjunto asesino e irracional, y donde la diversión se encuentra en la aniquilación del adulto.
Chicho ha declarado en más de una ocasión que no quiso hacer una película cargada de crítica social o un film de denuncia; sólo pretendía inquietar al público.
Vaya si lo consiguió.
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