Hodejegerne. Director: Morten Tyldum, Reparto: Aksel Hennie,
Nicolaj Coster-Waldau.
Roger es un
reputado cazatalentos noruego que vive en una maravillosa casa de campo con su
esposa Diana, la bella propietaria de una galería de arte. En realidad, está viviendo
muy por encima de sus posibilidades; si puede mantener ese ritmo de vida es
gracias a que se dedica a robar obras de arte. En la inauguración de una
galería, su esposa le presenta a Clas Greve, que, además de ser el candidato
perfecto para el cargo de director general de la compañía de Roger, es
propietario de una pintura muy valiosa. Roger ve que le ha llegado la
oportunidad de alcanzar definitivamente la independencia económica y empieza a
planear el robo del cuadro.
Headhunters
es un apreciable thriller
proveniente del frío Noruego, y se podría enmarcar dentro del estilo de novela
negra que últimamente nos llega del norte de Europa; eso si, con un ligero
toque de cine a la americana en cuanto a sentido del ritmo.
Morten
Tyldum ya había tocado el thriller nórdico con anterioridad, pero sorprende la habilidad con la que está contado el relato, la historia de un cazatalentos
codicioso y manipulador que se verá envuelto en una trama llena de sospechas y
asesinatos. El guión es solvente, y si quitamos algunas situaciones forzadas,
se podría decir que incluso solido y estimulante.
No
es que Tyldum sea Hitchcock –Algún momento huele a telefilm-, pero mantiene el
tipo y rueda algunas secuencias de suspense destacables, apoyado en una creible
interpretación de Aksel Hennie, que sabe transmitir perfectamente los miedos a
los que se enfrenta el personaje.
Headhunters
es cine negro, violento y oscuro,
al que se le podría achacar una moraleja previsible, pero que no echa por
tierra el buen hacer del conjunto.
Puede que
la película de Tyldum no pase a la historia del cine negro, pero es un buen
pasatiempo, más modesto pero mejor que otros thrillers estrenados este año en
las salas españolas.